Aprender a ver el mundo, con ojos nuevos, sin juicio ni cansancio.
Bruno es fotógrafo, ha aprendido a ver al mundo en sus matices de azules y encontrar la belleza donde algunos parecen haber olvidado. Bruno es un alma resiliente que ante los retos se crece buscando soluciones creativas para resolverlos.
El mundo se abre con millones de secretos que le inspiran a descubrir, desde un atardecer urbano, hasta lo complejo de cualquier dispositivo electrónico que no tarda en desarmar. Asi es, curioso, inquieto y creador.
Bruno al igual que cada uno de nuestros alumnos, es motivo de orgullo; razón por la cual nuestra profesión: la de educar, es la ¡más bonita del mundo!